Vitoria-Gasteiz :: Arqueología.


 

Excavaciones en Álava.

J. M. de BARANDIARAN  y D. F. MEDRANO.

INTRODUCCIÓN.

Las antigüedades prehistóricas de Alava han sido estudiadas por varios prehistoriadores y sus resultados han sido publicados en diferentes ocasiones, conforme al estado de las investigaciones de cada época. Sin embargo, los hallazgos realizados en los últimos cinco lustros no han sido dados a conocer o lo han sido de modo harto incompleto, en periódicos y revistas no especializadas. Por eso queremos publicarlos ahora, para contribuir a la preparación de una Carta Arqueológica de Alava.

Nos limitaremos a una descripción de los yacimientos, de los monumentos y de sus materiales, sin extendernos en teorías y prolijas explicaciones, que no conducen, en el estado actual de nuestros estudios, más que a embrollar, desorientar y acaso entorpecer el curso de las investigaciones.


1)
DOLMEN DE GURPIDE S.

Situación.

-El Dolmen de Gurpide S. (llamado también Urbide y Urpide),

se halla a 60 m. a la derecha de la vía férrea Bilbao-Miranda, en el término de Gurpide, de la aldea de Catadiano (Valle de Cuartango, Alava). 

En una pieza de cultivo propiedad de doña Rafaela Angulo, vecina de Catadiano, se levanta su túmulo de planta ovalada, cubierto de césped y de diversos arbustos.

A su lado pasa el camino carretil (en vasco gurpide significa camino de carros), que va de Catadiano a enlazarse con el que sube de Anda al vecino bosque y colina de Marubay. Más al este de la citada vía pasa el río Bayas y del otro lado de éste la carretera de Izarra a Zuazo de Cuartango. A partir de este último pueblo el itinerario para llegar al dolmen de Gurpide es el siguiente: En carretera hasta Catadiano; aquí se dobla a la izquierda, para atravesar el Bayas por el puente de piedra que conduce a los campos situados a la derecha del río; continúa el camino hacia occidente, hasta cruzar el ferrocarril, y se tuerce a la izquierda, para recorrer aun 200 metros de carretera, hasta el pie del dolmen.

Descripción.

-Llamamos Gurpides. a este dolmen para distinguirlo de otro dolmen que durante las excavaciones del verano de 1955 descubrimos a 60 metros al NW., en el mismo término.

De lejos se divisa el túmulo en el que crecen diversos arbustos y árboles.

Tiene 3'30 m. de altura y una planta ovalada, cuyo eje EW. mide 20 m. y el NS. 14 m. El túmulo constituye un montículo de piedras calizas y tierra.

En su zona central aparecen del lado E. varias losas de mármol hincadas en la tierra, las cuales enmarcan una cámara de 3 m. de largo, 2 m., de ancho y 3 m de alto, y una antecámara de 1,30 m. de largo, 1 m. de ancho y 1,50 m. de alto.

La cubierta debió desaparecer antes de que J. Apráiz hiciera las primeras excavaciones. La losa del lado S. se hallaba aún en su sitio en 1930 y poco después fue arrancada y utilizada en la construcción de una borda o granja próxima. Esta losa, un poco inclinada, formaba con las demás lanchas del monumento un espacio fácil de convertir en albergue o choza rústica, que sirvió de refugio durante cierto tiempo a un malhechor llamado Juan, descubierto y detenido al ser denunciado por el humo de una fogata encendida un día de nieve. (La fotografía que publicó Eguren, bajo el título de "Dolmen de Anda", representa este monumento visto del lado E).


Excavación.

-Fué el día 23 de agosto de 1955, cuando dimos comienzo a nuestra excavación de Gurpide. El dolmen había sido excavado antes --en 1892-- por Julián de Apráiz, quien halló la cámara sepulcral al parecer intacta, observando que "debajo de unas cobijas y todo alrededor del interior de la cámara, aparecieron a flor de tierra hasta una treintena de cráneos, arrimados a las losas, y sentados o acurrucados, sus troncos y extremidades respectivas, con dirección al centro, repitiéndose el fenómeno casi hasta el fondo del dolmen". 

Removió los huesos sin cuidar de recogerlos, hallando debajo de setenta u ochenta esqueletos, y a profundidad de metro y medio, un punzón de cobre de 78 mm. de longitud.

Ignoramos el paradero de las cobijas y del punzón de que habla Apráiz. 

En cuanto a los esqueletos humanos, que quedaron revueltos, fueron destrozados por remociones posteriores, efectuadas por buscadores de tesoros, 

Los religiosos Paúles de Murguía pudieron, sin embargo, recoger varios cráneos incompletos, que más tarde fueron estudiados por Eguren. Este termina así su estudio:

Los cinco cráneos son de individuos adultos, haciéndose muy dudosa la distinción de sexos. El estado incompleto en que se hallan no ha permitido obtener un mayor número de medidas que las diez señaladas para cuatro de los cráneos y las doce del quinto"... "No siendo suficiente, por corto número, para establecer comparaciones con las obtenidas en series de cráneos cuyos índices son iguales o difieren muy poco, nos abstenemos de relacionar los cráneos en cuestión con otros de razas conocidas; estudio este último, que únicamente podrá llevarse a cabo el día que los datos sean más numerosos"-

Como nos pareciera que los excavadores precedentes no habían retirado todo el material aprovechable decidimos efectuar una minuciosa exploración de todo el recinto dolménico, removiendo y examinando el contenido de la cámara y de la antecámara. En la fecha indicada nos trasladamos a Gurpide, ayudándonos en nuestra labor los vecinos de Anda: Cándido Fernández de Pinedo y Conrado Muguruza.

Empezamos las excavaciones por el lado E. del túmulo, levantando la tierra por capas. Mas, luego nos percatamos que todo se hallaba revuelto y no se conservaba ninguna estratificación original. El escaso material hallado en la parte superficial del túmulo (trozo de ofita, cantos rodados, fragmentos de huesos humanos y un cardium), debe proceder de la cámara.


Material recogido.

-No sabemos el actual paradero de los materiales extraídos en las excavaciones precedentes, por lo que daremos únicamente el recogido por nosotros.

a) Huesos. Casi todo el material óseo se hallaba en la cámara y en la ante-cámara. 

En ésta sobre todo formaba una brecha compacta. No nos parece exagerado el número de esqueletos que halló Apráiz, puesto que logramos extraer muchos huesos humanos y piezas dentarias pertenecientes a varias docenas de individuos, de los que algunos eran niños de escasa edad. Desgraciadamente tales restos, con los que llenamos varios cestos terreros, se hallan en estado de fragmentación tal que costará mucho trabajo obtener de ellos medidas útiles.

b) Cerámica. Aparecieron cuarenta y dos fragmentos de vasos. Atendiendo a su pasta pueden clasificarse en vasijas gruesas de color negro, gruesos de color rojizo, finos negros, finos rojos, negros por dentro y rojos por fuera, gruesos con desgrasante de cuarzo.

Hay fragmentos de base plana, bordes de vasijas e incluso fragmentos con incisiones, pero no permiten apreciar con seguridad las formas de las vasijas.

c) Minerales, piedras y fósiles.--Delante de la antecámara hallamos un canto de ofita y en la cámara tres cantos rodados, de los que uno es de cuarcita y dos de arenisca- Cuatro piezas de ocre fueron hallados en el recinto dolménico y un Mieras ter coranguinum.

d) Pedernales.--Hallamos sesenta y dos piezas de pedernal.

Por su forma pueden clasificarse: 17 láminas simples, seis láminas talladas y retocadas por una cara y lisas por la otra, una lámina denticulada, un raspador aquillado, un raspador cóncavo, una raedera, una punta poliédrica, un perforador, las retocadas y lascas amorfas, 12 puntas de flecha, de las que diez son foliáceas y dos con aletas y pedúnculo.

e) Alisador de hueso.

f) Fusayola de barro cocido.

g) Cuentas.

-Tres cuentas de piedra color blanco, una azulada y ocho de color verduzco, 51 cuentas de azabache, de las que unas son esféricas y su diámetro oscila entre 4 y 12 mm. y otras son cilíndricas, varias aplanadas y algunas bicórneas, adornadas o no con surcos, una es prismática.

h) Tres zinginarri o cristales de roca.

i) Aparecieron hasta 31 aretes y fragmentos de otros 65, cuyos diámetros oscilan entre 6 y 17 mm. Uno es de piedra verdosa, otro de piedra blanca, los demás son de hueso. Uno de los aretes es acanalado en su circunferencia, a modo de polea, con su cajera. Dos aretes y un fragmento aparecen adheridos y ajustados de modo concéntrico, lo que nos da idea de cómo eran utilizados.

j) Colgantes.--Existen tres colmillos de jabalí, uno de los cuales conserva restos del orificio de perforación.

 

Bibliografía.

-BECERRO, 1871; VELASCO, 1880; BARAIBAR, 1881; APRAIZ, 1893; EGUREN, 1914; BARANDIARAN, 1917, 1946 b, 1953; ELOSEGUI, 1953.


Fig. 1.-- Zona dolménica y situación del dolmen de Gurpide S.

 

Fig. 2. -- Dolmen de Gurpide S, Catadiano, visto del lado Sur.

 

Fig. 3. -- Dolmen de Gurpide S. La antecámara vista desde el W,

 

Fig. 4. -- Planta y túmulo del dolmen de Gurpide S.

Fig. 5. -- Planta y croquis laterales del dolmen de Gurpide S.

Fig. 6. -- Dolmen de Gurpide S. Hojas de silex. A 1/1.

 

Fig. 7. -- Industria lítica. Dolmen de Gurpide S.

 

Fíg. 8. -- Puntas de flecha de sílex. Dolmen de Gurpide S. A 1/1.

Fig. 9. -- Puntas de flecha de Gurpide S.


Fig. 10. -- Industria lítica del dolmen de Gurpide S.

Fig. 11. -- Cuentas de collar del dolmen de Gurpide S . A) de piedra, B) de hueso y C) de azabache.

Fig. 12. -- Cuentas de collar del dolmen de Gurpide S.